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miércoles, 25 de mayo de 2011

La historia de las camisetas del Real Mandril.

Muchas fueron las casacas que vistió el mandril aunque sólo las ultimas son acordes a los colores del escudo, rescatando que este pasó por un rediseño. Si bien el equipo tiene camisetas propias ahora, hemos pasado por múltiples diseños de juegos prestados y, en ocasiones, nos vimos limitados a usar la ropa particular de cada uno.


La primera, allá por el año 2007 y con un torneo anual (que fue desastrosamente organizado), el Real Mandril se presentaría con remeras blancas que cada jugador tuviera en su casa. Es decir, al no tener vestimenta de equipo, decidimos llevar un color con el que nos podamos diferenciar en la cancha.


Pasó un año y con nuevas y pocas incorporaciones los simios volverían a presentarse en el Torneo Universitario, esta vez con un juego de camisetas aportadas por Mario Figueredo, aguerrido defensor con mucha proyección y entrega. Casacas celestes con líneas negras a los lados y un cuello en V también en negro. Período 8/09:




En la final de la Ronda de Repechaje de ese mismo año, la saga presentaría unas camisetas manga larga totalmente rojas y cuello redondo. Otra vez, gracias a Mario Figueredo (entre Guillermo y Juan Cruz Parra), quien ahora disfruta de los réditos que trae su estudio jurídico en El Cuy.



Ya en el 2009, un equipo con más ambiciones se presentaba. A la incorporación de Roque Chavarría a finales del 2008, se sumaba Gino Voledo, Matías Ginestet y Francisco Caprara, entre los que más presencias tuvieron. Otra juego de casacas daría color a los pectorales de los jugadores, esta vez serían blancas con tres rayas rojas que descendían desde el hombro. El cuello de chomba (como el de las camisas) también en rojo. Este cuello nunca más se presentaría de nuevo. Así era la formación que lucía el juego.



Awará Guazú se lo mande porque no se lee bien en las fotos jeje.





La tercer vez que el equipo disputaría una final, sería con un juego de camisetas a 3 colores. Líneas horizontales de azul oscuro y blanco en el torso y rojo en las mangas con el mismo azul. Un detalle de la foto, Walter Martearena vería usurpada su identidad por Federico Baleri (entre Adrián A. y su hermano),.




  


El año 2010 recibiría al Mandril con su mejor posición en la historia del torneo llegando a la semifinal y quedando en el 4to puesto. Este año también variaría la indumentaria, esta vez gracias a Horacio Castro quien las consiguió a préstamo. Camisetas blancas con lineas brillantes, cuello en V negro y con otro detalle del mismo color sobre las mangas. El detalle de estas remeras es que por ser tan ajustadas, varios jugadores tuvieron inconvenientes a la hora de calzárselas, siendo peor en el caso de Pablo Arrieta quien directamente no pudo vestirlas.


 

Las últimas remeras que aún hoy usa la escuadra, fueron negociadas por Adrián A. y Mati C. por un monto mínimo de dinero. Este juego traería también medias y pantalones por lo que seríamos uno de los pocos equipos con un juego completo. El azul y blanco se presentaría ahora dispuestos verticalmente y con un cuello en V azul.



 



Esta fue la historia de las casacas que que vistió el Real Mandril a lo largo de su existencia. Algunas veces su uso estuvo ligado a cábalas y otras por pura necesidad, estas remeras guardan y guardarán incontable cantidad de recuerdos buenos y malos, pero que de cualquier manera abarcan un período de unión y lucha por aquello que aún hoy anhelamos alcanzar, el campeonato. Esperemos este sea el año.

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